Según los resultados de una nueva encuesta realizada por el Instituto Internacional de Sociología de Kiev (KIIS), el 79% de los ucranianos no planean abandonar Ucrania, incluso si se convierten en ciudadanos de los Estados Unidos o de la Unión Europea. Entre los jóvenes menores de 30 años, esta cifra es aún mayor: 74%.
Cuando se les preguntó si se mudarían a Estados Unidos o a países de la UE para obtener residencia permanente si se les concediera la ciudadanía sin condiciones, el 79% de los ucranianos respondió que se quedarían en casa. Al mismo tiempo, el 19% se mudaría a otro país.
Los analistas señalaron que en septiembre de 2022, sólo el 7% de los ucranianos dijeron que se mudarían a otro país.
KMIS explica que la disminución se debió al hecho de que algunas personas que querían mudarse lo hicieron en el contexto de la invasión, así como al crecimiento del patriotismo y el optimismo sobre el futuro de Ucrania.
Al mismo tiempo, en octubre de 2020, el 28% de todos los adultos ucranianos estaban dispuestos a irse a vivir al extranjero y el 69% quería quedarse en casa.
Los datos de la encuesta muestran que entre los ucranianos de entre 18 y 29 años en 2020, casi la mitad (46%) quisiera mudarse al extranjero. En septiembre de 2022, el indicador disminuyó al 13%, luego en septiembre de 2024 aumentó al 26%.
Aunque el crecimiento es notable, el 74% de los ucranianos menores de 30 años todavía quieren quedarse en Ucrania. Una tendencia similar es típica entre las personas de entre 30 y 44 años, de las cuales actualmente el 75% no quiere salir de Ucrania.
KMIS enfatiza que la salida de la población, especialmente de los jóvenes ucranianos, es un problema crónico de Ucrania durante los años de la Independencia, que se agudizó especialmente después de la invasión a gran escala.
La situación demográfica en Ucrania es ciertamente compleja, como afirman destacados expertos ucranianos e instituciones extranjeras.
Los resultados de la encuesta muestran que, de hecho, la mayoría de los ucranianos (en particular, los hombres ucranianos en edad de movilización y las mujeres más jóvenes o de mediana edad) quieren permanecer en Ucrania a pesar de todas las dificultades y riesgos existentes. La imagen que circula en los medios de comunicación de un joven nadando a través del Tisza o de una joven que va a Europa para vivir una vida mejor no es representativa de los hombres y mujeres de Ucrania. Sin duda, hay problemas, pero los ucranianos mantienen la fe en Ucrania, mantienen la fe en un futuro mejor y demuestran su disposición a quedarse y trabajar para lograr el futuro soñado.