El SBU detuvo al psiquiatra jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, que también ocupaba el cargo de vicepresidente de la Comisión Médica Militar Central (CMC). Es esta comisión la que resuelve la cuestión de la aptitud militar para el servicio, pero resultó que sus representantes podrían utilizar su puesto para enriquecimiento personal.
Durante los tres años de la guerra a gran escala (2022-2024), el funcionario logró acumular propiedades por valor de más de 1 millón de dólares:
- casa privada en el distrito de Obukhiv;
- dos apartamentos en Kyiv;
- un apartamento en Odessa;
- dos terrenos en el distrito de Obukhiv;
- cuatro BMW nuevos.
Además, durante los registros le incautaron 152.000 dólares y 34.000 euros en efectivo.
El funcionario que tenía en sus manos el destino de los militares corre el riesgo de ser condenado a hasta 10 años de prisión. El descontento está creciendo en la sociedad debido al hecho de que en tiempos de guerra tales acciones corruptas socavan la confianza en el sistema y desmotivan tanto a los militares como a los civiles.
Este caso enfatiza una vez más la necesidad de fortalecer el control sobre las actividades de los oficiales militares, especialmente en las estructuras que deciden sobre cuestiones de servicio.