Los expertos en belleza nos recuerdan que la sal marina común puede ser una herramienta eficaz para el cuidado de la piel. Se utiliza para baños, exfoliaciones y mascarillas, así como para un procedimiento conocido desde hace décadas: el lavado con sal.
¿Cuáles son los beneficios del lavado con sal?
Este procedimiento ayuda a la piel a renovarse, tonificarse y reafirmarse, reduce el brillo graso, elimina la descamación y limpia los poros. Los expertos señalan que el lavado con sal es una excelente alternativa a los exfoliantes: proporciona una limpieza profunda sin traumatismos mecánicos.
Cómo preparar la solución
Para el procedimiento, basta con disolver una cucharada de sal marina en 100 ml de agua caliente. La solución se puede guardar en un recipiente adecuado. Antes de lavarse, es necesario desmaquillarse completamente. La solución se aplica en el rostro con un disco de algodón, se deja actuar durante 5 minutos y luego se enjuaga con agua tibia. No es necesario usar geles ni espumas adicionales.
Recomendaciones de uso
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Si tu piel es propensa a la grasa, puedes usar un limpiador suave antes del procedimiento.
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Después del lavado, conviene aplicar una crema hidratante, ya que la sal tiene un efecto secante.
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El tratamiento óptimo es de 7 a 10 días consecutivos.
El lavado regular con sal ayuda a mantener la piel limpia y saludable, dejándola más fresca y firme.
