El presidente checo, Petr Pavel, expresidente del Comité Militar de la OTAN y general retirado, afirmó que una victoria rusa en la guerra contra Ucrania sería una derrota estratégica para todo Occidente. Lo afirmó en una entrevista con The Sunday Times, concedida en el Castillo de Praga, el lugar donde Hitler declaró el "protectorado de Bohemia y Moravia" en 1939. Este simbolismo le permitió establecer paralelismos históricos con los acontecimientos anteriores a la Segunda Guerra Mundial.
Pavel comparó el comportamiento actual de algunas capitales occidentales con la política de apaciguamiento que culminó en el Acuerdo de Munich y la posterior ocupación de Checoslovaquia en 1938. Advirtió que las conversaciones actuales sobre posibles negociaciones secretas entre Estados Unidos y Rusia, incluida la transferencia de territorios ucranianos, recuerdan peligrosamente a los acontecimientos previos a una catástrofe global.
" Si permitimos que Rusia salga vencedora de este conflicto, todos perderemos ", subrayó el dirigente checo.
Pavel estableció una clara analogía histórica entre la justificación de la Alemania nazi de la anexión de los Sudetes como "protección de la minoría alemana" y la propaganda rusa sobre la "protección de los rusoparlantes".
" Vladimir Putin utiliza la misma narrativa ", afirmó el presidente checo.
Está seguro de que Occidente no está traicionando a Ucrania como traicionó en su día a Checoslovaquia, pero sí está demostrando "una falta de voluntad para defender los principios que supuestamente defiende".
Pavel criticó duramente la respuesta de la OTAN a las violaciones sistemáticas del espacio aéreo por parte de aviones y drones rusos.
“ Las violaciones son deliberadas y bien planificadas… Rusia está poniendo a prueba nuestra determinación ”, dijo.
En su opinión, la Alianza debería estar preparada para tomar medidas más duras, incluido el derribo de un avión o un dron ruso, si fuera necesario.
" Llegará un momento en que tendremos que actuar con mayor decisión. Rusia no permitirá repetidas violaciones de su espacio aéreo. Y nosotros debemos hacer lo mismo ", afirmó.
Con el posible regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, los líderes europeos están cada vez más preocupados por un posible cambio en la política estadounidense hacia la OTAN. Pavel advierte que Europa debe ser capaz de compensar la retirada estadounidense en las áreas de inteligencia, logística y mando.
Propone crear un "pilar europeo de la OTAN", un sistema en el que los puestos de mando se dividirían entre Estados Unidos y los países europeos, lo que permitiría una rápida transferencia de mando en caso de ausencia estadounidense.
Pavel reconoce que después de la guerra, Europa necesitará un nuevo tratado de seguridad con Moscú, similar a los Acuerdos de Helsinki de 1975. Sin embargo, enfatiza: no habrá negociaciones hasta que Rusia detenga la agresión, reconozca la soberanía territorial de todos los estados y acepte limitar su propia expansión militar.
" Simplemente no podemos permitir que Ucrania pierda ", subrayó.
Al hablar de los desafíos globales, Pavel describió a China como un "rival sistémico" que busca convertirse en una potencia mundial hegemónica mediante un creciente poder militar y económico. Europa, en su opinión, debe crear un verdadero contrapeso.

