Ucrania se está preparando con confianza para un invierno difícil y, aunque las heladas prolongadas de hasta -20 grados afectarán el sistema eléctrico, no se convertirán en una amenaza crítica. El mayor desafío para la estabilidad energética son los bombardeos rusos. Así lo anunció el ministro de Energía, Herman Galushchenko.
Según Galushchenko, el sistema energético de Ucrania funciona actualmente de forma estable, a pesar del enfriamiento estacional.
"La temperatura ha bajado, no hay restricciones. Lo que más le afectará no será ni siquiera la temperatura, sino, desgraciadamente, los bombardeos. Si la temperatura es de -15 a 20 grados bajo cero y se prolonga durante mucho tiempo, seguramente afectará la situación, pero no será dramática", subrayó el ministro.
Las heladas, incluso las más severas, son menos peligrosas para la energía que los ataques con misiles desde Rusia. El presidente Volodymyr Zelenskyy también señaló que la estrategia rusa tiene como objetivo socavar la moral de los ucranianos mediante ataques a la infraestructura energética:
"Rusia continúa con los ataques combinados, acumula fuerzas y producción. Su objetivo es provocar apagones que generen descontento público", enfatizó Zelensky.
Ucrania se está preparando activamente para el período invernal, atrayendo apoyo internacional para fortalecer el sistema energético. La ayuda de los socios, incluidos los equipos y la financiación, permite minimizar el impacto de los factores climáticos y militares.
El Ministro de Energía enfatizó que cada ucraniano debe prepararse para los desafíos del invierno, pero creer en la estabilidad del país y del sistema energético.
