Las autoridades rusas han declarado que están dispuestas a negociar con Donald Trump sobre la situación en Ucrania, pero al mismo tiempo el Kremlin no renuncia a sus reivindicaciones territoriales sobre cuatro regiones de Ucrania. Estas declaraciones resaltan importantes narrativas políticas que pueden afectar significativamente las futuras relaciones internacionales y la continuación del conflicto en Ucrania.
"La disposición para mantener contactos con Trump permanece, así lo subrayó ayer Putin, pero no hay detalles concretos. "La disposición de Rusia a discutir la solución de Ucrania con Trump no implica un ajuste de las demandas en el marco de las iniciativas de paz de Vladimir Putin, anunciadas el 14 de junio en el Ministerio de Asuntos Exteriores", dijo Peskov.
Se recordará que en aquel momento Putin expresó como exigencia para el fin de la guerra la retirada de las tropas de Ucrania de cuatro de sus regiones: Donetsk, Luhansk, Kherson y Zaporizhzhia.