Ani Lorak, de 47 años, quien tras una invasión a gran escala finalmente eligió Rusia y ya obtuvo su pasaporte ruso, vuelve a ser el centro de atención. La cantante publicó nuevas fotos familiares dedicadas al Día de la Madre ruso, en las que posa con su hija Sofía y su madre, Zhanna Lynkova. Las fotos provocaron inmediatamente una oleada de comentarios, tanto por la postura política de Lorak como por la apariencia de su familia.

La apariencia de Sofia Nalchadzhioglu, de 14 años, fue la que más causó polémica. La chica ha madurado notablemente y, según los usuarios de redes sociales, aparenta mucha más edad de la que tiene. En mayo de 2025, corrieron rumores sobre una posible rinoplastia: las fotos mostraban una forma de la nariz alterada, radicalmente diferente a las fotos anteriores. Ni Lorak ni Sofia comentaron estos rumores.
En las nuevas fotos, la diferencia en la apariencia de la hija ha vuelto a ser tema de debate. Los usuarios dejan decenas de mensajes comparando las imágenes de archivo con las más recientes. Los comentarios también contienen críticas a la propia Lorak, desde recordatorios de su infancia en el internado de Chernivtsi hasta acusaciones de corrupción política y de pasarse al bando del país agresor.
Por otra parte, la red está debatiendo la apariencia de la madre de la artista Zhanna Lynkova. Algunos usuarios no reconocieron a la expresentadora de la televisión de Chernivtsi; la mujer parece mucho más joven que en fotos antiguas. Los comentarios sugieren que también podría haberse sometido a cirugía plástica.
Las fotos familiares de Lorak, que se suponía que serían una simple publicación navideña, se han convertido en un nuevo motivo informativo para criticar al cantante. El público ucraniano mantiene una actitud dura hacia el artista, quien no condenó la invasión rusa y continúa trabajando activamente en la Federación Rusa.

