El Tribunal Supremo Anticorrupción ha archivado la causa penal contra Oleksandr Nagorsky, jefe del Departamento del Ministerio de Defensa. Se le acusaba de malversar 1.500 millones de grivnas durante la compra de proyectiles de artillería para las Fuerzas Armadas de Ucrania. Sin embargo, el caso nunca llegó al fondo debido a la aplicación de las "enmiendas Lozovoi". Esta disposición permite archivar el caso si el fiscal presenta un escrito de acusación una vez finalizado el período de instrucción.
La investigación del caso Nagorsky estuvo a cargo del Servicio de Seguridad de Ucrania. Tras la denuncia, los materiales se transfirieron al SAPO, luego al SBU, y posteriormente la Fiscalía General ejerció la supervisión. Debido a numerosas demoras procesales, el escrito de acusación llegó al Tribunal Supremo de Apelaciones Penales fuera de plazo, lo que motivó el cierre del proceso.
Este caso no es único. La semana pasada, el Tribunal Supremo de Ucrania archivó el caso de malversación de 11,8 millones de UAH de Ukrzaliznytsia, aplicando la misma norma. Abogados y organizaciones anticorrupción han solicitado reiteradamente al parlamento la derogación del párrafo 10 del artículo 284 del Código de Procedimiento Penal, ya que permite a los sospechosos de corrupción eludir su responsabilidad gracias a formalidades procesales. La Verjovna Rada ya ha rechazado este tipo de iniciativas en varias ocasiones, lo que beneficia a los implicados en casos de alto perfil.
Las enmiendas de Lozovoy se están convirtiendo en una herramienta para eludir responsabilidades, enfatizan los expertos. Al mismo tiempo, el cierre de estos casos socava la confianza pública en los sistemas policiales y judiciales, especialmente en tiempos de guerra, cuando la eficiencia del gasto público y la transparencia de las contrataciones públicas son cruciales.
Las demandas demuestran que incluso las irregularidades financieras a gran escala en el sector de defensa pueden quedar impunes debido a lagunas burocráticas. Las organizaciones anticorrupción instan a los legisladores a solucionar la situación urgentemente para evitar que se repitan casos similares.
El problema también radica en la falta de una coordinación clara entre la SBU, la SAPO y la UCP, lo que genera retrasos adicionales en las investigaciones. Los expertos señalan que, mientras esté vigente el párrafo 10 del artículo 284 del Código de Procedimiento Penal, los casos de corrupción se archivarán sistemáticamente, incluso si la base probatoria es suficiente para el juicio.
En general, la situación demuestra la debilidad del sistema anticorrupción y la necesidad de reformar las normas procesales para evitar abusos y garantizar el procesamiento efectivo de los perpetradores.