La mina de Pokrovska sigue siendo una de las instalaciones industriales y estratégicas clave en la zona de combates en la región de Donetsk. Según la unidad "Gostry Kartuzy" de las Fuerzas Armadas de Ucrania, el territorio minero ha sufrido daños considerables y parte de las instalaciones están bajo control de las fuerzas de ocupación rusas.
La empresa se encuentra en una dirección crítica para la defensa de Pokrovsk. Es a través de este sector que el enemigo intenta expandir su cabeza de puente y aumentar la presión sobre el flanco izquierdo de la ciudad.
En diciembre de 2024, la administración de Pokrovskaya anunció una suspensión parcial de las operaciones debido al avance del frente. La producción se detuvo por completo en enero de 2025. En marzo, un bombardeo ruso destruyó el pozo principal y el montacargas de gestión de la mina, lo que imposibilitó la restauración de la instalación.
Los dos principales complejos mineros están ahora completamente destruidos. Uno de ellos está ocupado, el otro permanece bajo el control de los defensores ucranianos, pero sufre ataques diarios.
Después de 2014, la mina de Pokrovska era la única empresa operativa en territorio controlado por Ucrania que producía carbón coquizable, una materia prima estratégica para la metalurgia. Su destrucción supone graves riesgos para la industria y la estabilidad energética de Ucrania.
Actualmente se desconocen la magnitud de las pérdidas y el futuro de la empresa, pero los soldados de las Fuerzas Armadas de Ucrania recalcan que la defensa de esta dirección no es solo una cuestión de estrategia militar, sino también de seguridad económica del Estado.

