Los agentes del orden informaron sobre las sospechas de una militar de la región de Poltava que, durante la ley marcial, se iba sistemáticamente de vacaciones al extranjero en lugar de servir.
Según la Oficina Estatal de Investigación, un sargento superior de una de las unidades militares abandonó su lugar de servicio ocho veces entre 2022 y 2024 y visitó centros turísticos en Montenegro y Polonia.
A pesar de su ausencia, la mujer continuó recibiendo apoyo económico. La dirección de la unidad no reaccionó ante sus ausencias, lo que provocó un pago injustificado de casi 190.000 grivnas del presupuesto estatal.
Los investigadores acusan a la militar de evasión del servicio militar mediante engaño bajo la ley marcial (artículo 409, parte 4, del Código Penal de Ucrania), así como de fraude que causó daños considerables (artículo 190, parte 3, del Código Penal de Ucrania). La pena máxima prevista en estos artículos es de hasta 10 años de prisión.
Durante la investigación, la sospechosa reembolsó los fondos obtenidos ilegalmente. Simultáneamente, se investigan las acciones del mando de la unidad militar, que continuó acumulándole pagos a pesar de su ausencia.