Gran Bretaña se vio obligada a dejar de suministrar misiles de crucero Storm Shadow a Ucrania en el verano de 2024 debido a una reducción significativa de sus reservas internas. Así lo informó The Times basándose en sus propias fuentes en el sector de defensa.
"Las reservas de Gran Bretaña han alcanzado un nivel por debajo del cual el liderazgo militar no está dispuesto a hundirse, porque una cierta cantidad debe mantenerse en reserva para proteger los propios intereses de Gran Bretaña", escribió el periódico.
Al mismo tiempo, otras fuentes creen que la transferencia de Storm Shadows adicionales a Ucrania ahora, antes de la decisión de autorizar su uso en el territorio de Rusia, "puede significar que no se utilizarán tan eficazmente como podrían serlo en unos pocos meses."