A pesar de la pandemia y la guerra a gran escala, la movilidad de los ucranianos se mantuvo muy alta. Según el Servicio Estatal de Fronteras, entre 2020 y 2025 (hasta los primeros nueve meses de 2025), se registraron 104,97 millones de cruces fronterizos para salir de Ucrania. Al mismo tiempo, la entrada de extranjeros a Ucrania durante este período ascendió a 16,91 millones de casos.
Los guardias fronterizos afirman que la dinámica de salidas se ha mantenido en un nivel consistentemente alto, variando según las circunstancias. En 2020, año de la pandemia de COVID-19, los ucranianos realizaron 16,54 millones de salidas; en 2021, 19,60 millones; en 2022, 18,94 millones; en 2023, 17,75 millones; y en 2024, 17,83 millones. Entre enero y septiembre de 2025, se sumaron otras 14,30 millones de salidas. En total, esto representa más de 104,9 millones de cruces fronterizos en dirección a la salida, incluyendo tanto salidas laborales y de larga duración como viajes de corta duración.
El flujo de extranjeros hacia Ucrania disminuyó drásticamente en 2022, pero posteriormente comenzó a recuperarse. En 2020, se registraron 3,39 millones de llegadas de extranjeros; en 2021, 4,27 millones; en 2022 la cifra descendió a 2,31 millones; en 2023 aumentó a 2,45 millones; en 2024, a 2,55 millones; y en los primeros nueve meses de 2025, a 1,94 millones. Esto indica un retorno gradual de la actividad comercial, humanitaria y turística.
Al solicitarle estadísticas más detalladas —en particular, el número de salidas de hombres de entre 15 y 25 años entre 2022 y 2025, así como el número de extranjeros que permanecieron en Ucrania durante tres meses o más— el Servicio Estatal de Fronteras de Ucrania explicó que mantiene registros oficiales de los cruces fronterizos. Los indicadores no contemplados en los formularios estatales no se almacenan en sus bases de datos. El departamento subraya que el volumen de cruces depende directamente de la situación socioeconómica y de seguridad del país.
Las estadísticas muestran que, incluso en los años más difíciles, los ucranianos mantuvieron su movilidad, y la entrada de extranjeros tras el fracaso militar se está recuperando gradualmente. Para obtener un panorama más detallado de los flujos migratorios, será necesario integrar datos de otros registros estatales, algo que excede las capacidades de las estadísticas fronterizas convencionales.

