Tras la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia, los países occidentales impusieron sanciones a gran escala, en particular prohibiendo la importación de artículos de lujo a la Federación Rusa. Las restricciones también incluyeron automóviles caros, a los que la élite rusa se había acostumbrado. Sin embargo, un año después del inicio de la guerra a gran escala, se encontraron empresarios que establecieron planes para el suministro de dichos automóviles a través de los países del llamado "bloque gris".
Según la investigación de StopKor, entre los organizadores de estos esquemas podría estar el ciudadano ucraniano Vyacheslav Belimenko.
En marzo de 2024, Belimenko registró la empresa Smart NV sro en Eslovaquia. A los pocos meses de su registro, esta empresa adquirió dos coches de lujo de la empresa alemana AUTOHAUS BÜCKEBURG:
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BMW M5;
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Mercedes-Benz GLS 450.
El valor total de la operación fue de casi 225 mil euros.
Estos vehículos fueron luego revendidos a las empresas kazajas RR-LOGISTICS&TRADE y AMANAT 777. Este esquema se utiliza para eludir las sanciones: los automóviles europeos se importan primero a los países de Asia Central y luego a Rusia.
Los periodistas rastrearon el movimiento de ambos vehículos utilizando sus códigos VIN:
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Un Mercedes-Benz GLS 450 se incendió en la aduana rusa;
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El BMW M5 fue descubierto en el sitio web de ventas de automóviles bielorruso Avito: indicó que el automóvil se encontraba en Minsk.
Belimenko no solo está involucrado en tramas de coches. La investigación indica que podría haber obtenido la ciudadanía rusa en 2014 en la Crimea ocupada. En 2018, se compró a su nombre un apartamento en Moscú valorado en 172.000 dólares.
Al mismo tiempo, su madre compraba propiedades cerca de Kiev. Belimenko se convirtió en propietario de un terreno en España, cuyo valor superaba los dos millones de euros.
En los materiales periodísticos se menciona que los posibles socios comerciales de Belimenko son la empresa rusa “Leader TM”, que opera en el sector de la electrónica y la venta de teléfonos.
Al momento de publicarse la investigación, el propio Belimenko no respondió a las llamadas de los periodistas. Su supuesto socio de la empresa alemana AUTOHAUS BÜCKEBURG, Andriy Teneta, declaró que solo estaba dispuesto a comentar la situación a través de su abogado.