En la región de LVIV, se registraron dos casos de pérdida completa de visión en los niños debido a la infección después de los rasguños de los gatos. Según los médicos de LVIV "Okhmatdit", en ambos casos es una complicación grave del síndrome de scratch de CAT, lo que condujo a cambios irreversibles a los ojos de los niños.
Ivan de cinco años y Timoteo de cuatro años, ambos fueron víctimas de la infección de Bartonella Hensaaelae, que se transmite a través de rasguños de gatos infectados. En el primer caso, la inflamación envolvió todas las conchas del ojo, causó desprendimiento de retina, y a pesar de dos cirugía, el bebé perdió la vista en un ojo.
"Fue operado dos veces, tomando películas fibrosas, pero el ojo izquierdo no se pudo salvar", explicó el oftalmólogo Alexander Sondhei.
En el segundo caso, hay un rasguño menos notable que los padres no tomaron en serio. Pero la infección se ha propagado rápidamente y ha llevado al estrabismo y al discapacidad visual severa. El niño también ve un ojo más.
Los médicos enfatizan que cualquier enrojecimiento, dolor o hinchazón en el ojo después del contacto con el animal, una excusa para consultar a un especialista de inmediato.
"Si diagnostica la infección de manera oportuna, se puede preservar la visión. Pero si la bacteria ingresa a las estructuras internas del ojo, las posibilidades de que regrese la visión son escasas", dice la oftalmóloga Tatiana Lenov.
¿Qué debes saber sobre el síndrome de Cat Scratch?
Es una infección bacteriana causada por Bartonella heselae. Se transmite principalmente a través de rasguños o picaduras de gatos. En los niños, la enfermedad puede ser más difícil: afecta los ganglios linfáticos, los ojos y, a veces, el sistema nervioso central.
Los síntomas incluyen fiebre, hinchazón, enrojecimiento, dolor ocular, visión deteriorada. En casos raros, pérdida de visión u otras complicaciones graves.
Los médicos instan a los padres a seguir reglas simples pero importantes:
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No permita que los niños pequeños se comuniquen con los gatos de cerca, especialmente si el animal es agresivo o no contado;
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Después de rascar, asegúrese de tratar la herida con un antiséptico;
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Observe el pozo del niño dentro de unos días después del contacto con el animal;
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Póngase en contacto con su médico inmediatamente si aparecen síntomas.
También se aconseja a los veterinarios que examinen a las mascotas regularmente, ya que el patógeno de Bartonella a menudo no tiene signos externos.
Estas historias son una advertencia para cada familia. Los gatos pueden parecer seguros, pero incluso un rasguño puede convertirse en una tragedia. En un país donde se registran diariamente los nuevos casos de enfermedades infecciosas, la atención y la atención médica oportuna pueden salvar la visión de su hijo.