Los analistas militares del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) predicen que los ocupantes rusos pueden continuar con acciones ofensivas para desestabilizar las líneas de defensa ucranianas en la primavera de 2024, y también se prepararán para nuevas acciones ofensivas esperadas en el verano de este año.
La asistencia de seguridad occidental desempeñará un papel fundamental en la capacidad de Ucrania para mantener territorio y repeler nuevas ofensivas rusas en los próximos meses, según el informe de ISW. Recientemente, las Fuerzas Armadas de Ucrania lograron frenar el avance de los ocupantes al oeste de Avdiyivka, pero la falta de medios materiales obliga al ejército ucraniano a priorizar recursos limitados en zonas críticas del frente.
ISW enfatiza que las fuerzas rusas están enfocadas en mantener la iniciativa en todo el teatro de operaciones y reequilibrar dinámicamente sus esfuerzos ofensivos esta primavera y verano. Es de suponer que el mando militar ruso pretende aprovechar los éxitos y las previsiones de falta de apoyo a las fuerzas armadas para llevar a cabo nuevas acciones ofensivas.
Las fuerzas ucranianas bien equipadas han demostrado que pueden impedir que las fuerzas rusas obtengan avances incluso menores durante ofensivas a gran escala. ISW cree que Ucrania podrá estabilizar la línea del frente y prepararse para repeler la ofensiva rusa declarada si se le proporcionan recursos materiales.