La vigésima reunión en formato Ramstein puede ser decisiva para prevenir una posible escasez de misiles para las fuerzas de defensa aérea de Ucrania.
Los expertos señalan la existencia de formas alternativas de ayudar a las Fuerzas Armadas de Ucrania en el suministro de armas, incluso sin un presupuesto aprobado, mediante la participación de "terceros países".
Una posible opción es el programa Excess Defense Articles, que prevé la transferencia de excedentes de armas a un costo mínimo, sujeto al pago de los costos logísticos y de recuperación y reparación por parte del destinatario.
Además, los misiles antiaéreos estadounidenses como el AIM-120 y el AIM-9 utilizados por NASAMS están en servicio con la OTAN y otros países que apoyan a Ucrania. Un posible escenario implica la transferencia de misiles a Ucrania y, a cambio, el país recibirá un descuento por reponer sus propias existencias encargando nuevos misiles a Estados Unidos.
Sin embargo, el principal problema son los misiles del sistema Patriot. En Europa, la producción de este sistema la realiza una empresa conjunta de MBDA Alemania y Raytheon: COMLOG. Hay opciones para la transferencia de misiles antiaéreos a Ucrania, pero se trata de esquemas complicados con varios participantes basados en obligaciones y promesas mutuas.
Sin embargo, cualquier medida más compleja, que implique el suministro directo de armas, sigue siendo extremadamente confusa y confusa.