Las tropas rusas en la región de Járkov se enfrentan a graves problemas de equipamiento, lo que les obliga a conservar vehículos de combate y utilizar principalmente asaltos de infantería. Así lo informó en el aire del teletón el portavoz de la OTU de Járkov, Yevhen Romanov, señalando que el enemigo está tratando de compensar las pérdidas con mano de obra.
"Observamos que el enemigo está tratando de compensar las pérdidas iniciando nuevas unidades. También acumula municiones y concentra equipos en determinadas zonas, pero no los utiliza porque tiene escasez de estos equipos", dijo Romanov. Según él, los ocupantes no están preparados para utilizar el equipo en las batallas, sino que realizan activamente asaltos de infantería, tratando de guardar el equipo para otras tareas.
En este sentido, las Fuerzas de Defensa de Ucrania ya han destruido un número significativo de vehículos blindados de combate del enemigo, lo que agrava aún más la escasez de equipamiento para los rusos.
La situación sigue siendo especialmente tensa en la región de Vovchansk, donde el enemigo no deja de asaltar las posiciones de las tropas ucranianas. Con el apoyo de la aviación, el enemigo intentó varias veces romper las defensas, pero todos estos intentos fracasaron.
La situación en la provincia de Kupian también sigue siendo difícil. Las tropas rusas, al no haber logrado capturar la parte de la margen izquierda de la región de Kupyan antes del 1 de noviembre, continúan lanzando nuevas fuerzas en esta parte del frente para completar la tarea de ocupar la región.