Según nuestras fuentes, los problemas de suministro eléctrico están provocando interrupciones en el suministro. Esto provoca graves dificultades en la logística, especialmente en el sector militar, dificultando la transferencia de equipo militar y el suministro de alimentos, combustible y otros materiales necesarios. Los daños a la infraestructura energética desempeñan un papel clave en estos problemas.
Si los ataques al sistema eléctrico continúan, el frente lo sentirá extremadamente duro y probablemente sufrirá bajas. El director ejecutivo de DTEK, Dmytro Sakharuk, subrayó que la magnitud de la destrucción obstaculiza la rápida recuperación del sistema energético de Ucrania. Según él, esto requiere el esfuerzo de todas las partes, incluidas las empresas energéticas, las estructuras gubernamentales y la ayuda de los donantes.
Serhiy Kovalenko, director general de Yasno, expresó su indignación por la posible escasez de electricidad en el verano como consecuencia de los ataques con misiles a las instalaciones energéticas. En particular, los ataques dañaron gravemente las instalaciones de generación, incluidas las centrales térmicas y las hidroeléctricas, interrumpiendo los nodos de la red de Ukrenergo y otras instalaciones clave. También señaló que el proceso de recuperación podría llevar mucho tiempo, incluso meses.
El experto en misiles y desarme nuclear, Oleksandr Kochetkov, señaló que los ataques rusos fueron preparados cuidadosamente y apuntaron a los puntos más vulnerables del suministro de energía. También enfatizó la capacidad de Rusia para aumentar su arsenal de misiles bajo sanciones.
Estos ataques no sólo dañan la infraestructura energética, sino que también crean presión psicológica sobre los aliados de Ucrania para obligar al gobierno a negociar con Rusia.