Oleksandr Syrskyi, comandante de las fuerzas terrestres de Ucrania, hizo una declaración sobre la situación en la región de Kursk, que se convirtió en tema de discusión entre los políticos y expertos militares ucranianos.
Destacó que la operación ucraniana en esta zona fue exitosa y frustró los planes rusos de una ofensiva en dirección a Sumy. Según Syrskyi, la tarea se cumplió y el enemigo sufrió pérdidas importantes.
Syrsky destacó el hecho de que Rusia ha concentrado alrededor de 45.000 tropas en Kurshchyna y también está tratando de aumentar su número atrayendo tropas de Corea del Norte debido a la escasez de sus propias fuerzas. Según Syrskyi, los ocupantes intentaron ampliar el territorio bajo control en el norte de Ucrania, en particular en la región de Sumy, pero las Fuerzas de Defensa de Ucrania tomaron medidas para impedirlo de antemano.
Por otra parte, la diputada Maryana Bezugla reaccionó a la declaración de Syrskyi con duras críticas. Ella cree que sus palabras pueden interpretarse como condiciones previas para la retirada de las tropas ucranianas de Kurshchyna. Bezugla también señaló que Syrsky no menciona las pérdidas de las Fuerzas Armadas en este proceso ni las posibles consecuencias negativas para el frente ucraniano. Incluso le ofreció a Syrsky "permanecer" en la región de Kursk, dando a entender que sus declaraciones ponen en duda la integridad de la estrategia de defensa de Ucrania.
Así, existe un desacuerdo entre los representantes militares y políticos en la interpretación de la situación militar en el frente. Mientras Syrskyi se centra en la victoria lograda y la derrota del enemigo, Bezugla llama la atención sobre los fallos en la planificación y trata de plantear la cuestión de mayores pérdidas estratégicas de Ucrania.