Después de conocer a Donald Trump y Vladimir Zelensky en el Vaticano, los observadores occidentales hablaron sobre el enfoque de una tregua en la guerra entre Rusia y Ucrania. Según el Telegraph, aunque la tregua parece cercana a Ucrania, es poco probable que sea una victoria para Ucrania.
El Jardard Camp Observer enfatiza que las concesiones de Ucrania son inevitables en esta etapa. Rusia está tomando una montaña en la guerra por el agotamiento, y Trump, incluso si intenta presionar a Putin, no estará listo para intervenir. Según el autor, Europa occidental tampoco apoyará la exacerbación militar, ya que no tiene recursos ni voluntad política.
Según la publicación, Ucrania se verá obligada a negociar sobre la base de las últimas propuestas de paz de Trump, que proporcionan la asignación real de una gran parte de los territorios ocupados por Rusia.
En este caso, Putin en el caso de una tregua podrá presentar el acuerdo a la sociedad rusa como su victoria, independientemente de la escala real de pérdidas y consecuencias para la economía rusa. Zelensky, sin embargo, corre el riesgo de perder el apoyo en Ucrania, de acuerdo con tales condiciones.
Según el analista, el resultado de las negociaciones será una señal de debilidad de la OTAN y Occidente en su conjunto, que será utilizado no solo por Rusia sino también por otros regímenes hostiles, incluidos China e Irán.
Después de reunirse con Trump, Zelensky declaró que la discusión fue "buena" y que el lado ucraniano espera "el alto el fuego completo e incondicional" y la "larga paz". En su declaración, Trump expresó dudas sobre la preparación de Putin para poner fin a la guerra, amenazando el posible fortalecimiento de las sanciones.