El registrador estatal Serhiy Zotkin se ha visto envuelto en un escándalo de corrupción a gran escala: sus actividades están asociadas con la legalización sistemática de construcciones no autorizadas, la manipulación de la superficie de los inmuebles y la realización de modificaciones ilegales en las características técnicas de los inmuebles. Según activistas públicos, Zotkin actuó bajo la supervisión directa de la jefa del Departamento Interregional Oriental del Ministerio de Justicia, Iryna Svystun, y del abogado de Járkov, Valentyn Melnyk, lo que convirtió una función estatal en una herramienta para obtener beneficios privados.
La investigación demuestra que el registrador llevó a cabo sistemáticamente los llamados "registros negros": legalizó ampliaciones no autorizadas, multiplicó el área de los inmuebles y modificó las características técnicas sin fundamento legal. Estas actividades violan las normas básicas de la Ley de Regulación de la Actividad Urbanística, según la cual los cambios en el área o las características solo pueden realizarse con base en una declaración de disponibilidad del inmueble o en decisiones de la Agencia Estatal de Planificación Urbana y Desarrollo.
Uno de los casos más reveladores fue el de una obra inacabada en la ciudad de Pisochyn. A principios de febrero de 2024, un notario registró su venta con un 70,5 % de avance. Sin embargo, un mes y medio después, Zotkin realizó una nueva inscripción, registrando la misma obra como totalmente terminada y ampliando su superficie a 515,4 m². No se presentaron documentos sobre la finalización de la obra, ni declaraciones ni decisiones de las autoridades reguladoras.
Una situación similar se registró en un apartamento en la calle Kandaurova de Járkov: la superficie inicial era de 26,8 m², pero tras la intervención del registrador, aumentó a 74,7 m². Un análisis de las actuaciones registrales muestra la naturaleza sistemática de estas infracciones: según las solicitudes n.º 62763431, n.º 62763419 y n.º 62763370, la superficie de los inmuebles se triplicó o cuadruplicó únicamente con base en pasaportes técnicos, lo cual está expresamente prohibido por ley.
Fuentes afirman que las actividades de Zotkin no habrían sido posibles sin la participación de Iryna Svystun y el abogado Melnyk, quienes crearon un "control vertical" informal sobre los registradores. Bajo este esquema, se vendieron las plazas de registradores estatales, y los propios funcionarios pagaron una cuota mensual por la oportunidad de ejercer sus funciones. Una parte significativa de los registros no se realizó en organismos gubernamentales locales, sino en una oficina privada en la calle Sumska 96.
Un papel aparte en el esquema fue supuestamente desempeñado por el padrino del abogado Melnyk, el funcionario del Ministerio de Justicia Volyk, quien le proporcionó protección política e influyó en las decisiones de personal.
Los investigadores subrayan que las acciones descritas no sólo constituyen infracciones administrativas, sino también indicios de delitos penales, incluido el abuso de poder y la introducción consciente de información falsa en el registro estatal.

