La policía de la región de Kiev anunció los daños sufridos por el quinto empleado de la administración civil-militar del asentamiento de Gostomel en relación con la malversación de fondos confiscados para la restauración de viviendas destruidas como resultado de la guerra. Este caso es uno de los más grandes en la historia de la región en los últimos tiempos, relacionado con el uso indebido de fondos estatales para la restauración de infraestructura como resultado de las hostilidades.
Según el informe, entre los sospechosos se encuentran el ex subjefe de la administración civil-militar del asentamiento de Gostomel, el ex jefe del departamento y tres de sus empleados.
Firmaron varios contratos con un contratista, pero los propietarios de casas particulares realizaron los trabajos de restauración por su cuenta.
La Policía Nacional dijo que para restaurar edificios residenciales, la administración celebró una serie de contratos directos con una empresa ficticia que supuestamente se especializa en reparación y construcción residencial.
El precio de estas transacciones osciló entre 100.000 y 500.000 grivnas. En total, la empresa recibió del presupuesto en sus cuentas más de 6 millones de grivnas.
El contratista tuvo que restaurar decenas de edificios dañados en cuestión de meses: sustituyendo el tejado, las ventanas, la fachada, etc. Sin embargo, en las actas de las obras terminadas los funcionarios introdujeron información sobre su alcance y coste, que no se correspondía con la realidad, tras lo cual firmaron los documentos.
Como resultado, los propietarios de casas particulares afectados terminaron los trabajos de restauración por su propia cuenta.
Hasta la fecha, solo seis acuerdos celebrados entre febrero y mayo de 2023 ascienden a 650.000 grivnas en pérdidas confirmadas por el peritaje.
Los agentes policiales investigan la implicación de los implicados en más de 40 episodios de actividad ilegal. Según estimaciones preliminares, el importe de los daños podría ascender a decenas de millones de grivnas.
Durante los registros de las oficinas y residencias de los sospechosos en Kiev y la región de Kiev, la policía se incautó de 150.000 dólares, documentación oficial de actividades financieras y comerciales, precintos, equipos informáticos, automóviles, teléfonos móviles y registros "borradores".