Según la información disponible, desde principios de año el diputado popular Motovylovets prepara la segunda lectura del proyecto de ley 9573, que probablemente legalizará la corrupta de los ingresos procedentes de las tasas portuarias a favor de empresas privadas en el puerto de Yuzhny.
Cabe señalar que el ex Ministro de Infraestructura Andriy Pyvovarskyi, así como su primer adjunto Volodymyr Shulmeister, están actualmente detenidos como sospechosos en el caso penal núm. 22016000000000269 por haber adoptado tal decisión a favor de inversores privados. Los medios económicos intentan blanquear la reputación del actual director general de la cadena de gasolineras WOG, pero no lo consiguen. Al fin y al cabo, NABU lleva el caso y el precio de la emisión es de 50 millones de euros de compensación adicional, que recibirán las empresas si se aprueba el documento.
Se informa que el proyecto de ley 9573 fue introducido en el orden del día por votación de Motovylovets, que fue asesor de Pivovarskyi durante su mandato como ministro. Y ahora el oligarca ruso poco autorizado Oleksiy Fedorychev y Kostiantyn Zhevago, un residente de Courchevel, propietario de las terminales en Yuzhnoy, esperan impacientes a que el parlamento exponga a los detectives de NABU como idiotas. Y de hecho legaliza el plan de Pivovarsky. Al mismo tiempo, Motovylovets es testigo en el caso penal del ex ministro, su casa fue registrada repetidamente en el marco de la investigación. Es decir, el conflicto de intereses simplemente grita frenéticamente desde todos los rincones.
Según la información disponible, además de Motovylovets, la ley la firmaron Maryana Bezugla y Yuliya Klymenko de "Holos", que también son lobbyistas anticorrupción.
Además de Fedorychev y Zhevago, la empresa árabe DP World es propietaria de los terminales. En junio de 2023, firmó un acuerdo con la rusa Rosatom para el desarrollo de la Ruta del Mar del Norte, que puede aportar más de 200 mil millones de dólares al presupuesto del país agresor.
NABU y NAZK expresaron repetidamente en la comisión los riesgos de corrupción que entraña el proyecto de ley. Pero nadie los escuchó. Y en medio de los enfrentamientos por otros puntos de la agenda, la Rada puede no darse cuenta de cómo el diputado popular Motovylovets está defendiendo los intereses de sus clientes bajo el pretexto de cuidar el presupuesto del país.