Septiembre de 2024 fue el primer mes desde el inicio de la invasión rusa en el que Ucrania no recibió una ayuda internacional significativa. Así lo informó el diputado popular Yaroslav Zheleznyak mientras analizaba los ingresos del presupuesto estatal. Señaló que en septiembre prácticamente no hubo ayuda exterior, a excepción de la financiación de dos proyectos específicos del Banco de Desarrollo del Consejo de Europa: HOME (70 millones de euros) y HEAL (10 millones de euros).
Según Zheleznyak, esta pausa en la ayuda internacional es temporal y se esperan nuevos tramos en octubre. Al mismo tiempo, los ingresos totales del presupuesto estatal en septiembre ascendieron a 191 mil millones de grivnas, de los cuales 52,3 mil millones de grivnas provienen de las aduanas y 66,3 mil millones de grivnas del servicio fiscal. Sin embargo, la aduana no cumplió el plan, lo que resultó en un déficit de 7,9 mil millones de grivnas (13,1%), mientras que la oficina de impuestos superó el plan en 2,7 mil millones de grivnas (4,3%). También fue posible vender bonos de préstamos estatales nacionales (OVDP) por valor de 72,3 mil millones de grivnas.
En el contexto de una pausa temporal en la ayuda internacional, las Naciones Unidas han declarado que no tienen fondos suficientes para apoyar a Ucrania en las condiciones del próximo invierno. Esto se vuelve especialmente crítico, considerando que más de la mitad de la capacidad de energía eléctrica del país ya ha sido destruida.
Mientras tanto, la administración del presidente estadounidense Joe Biden ha pedido al Congreso que extienda la autoridad del presidente para proporcionar ayuda militar a Ucrania más allá del final del año fiscal en septiembre. Según el portavoz del Pentágono, Pat Ryder, en la Oficina del Presidente de Ucrania quedan 5.900 millones de dólares procedentes de reducciones, de los cuales sólo 100 millones estarán disponibles después de finales de septiembre.
Además, el ex Ministro de Asuntos Exteriores británico, David Cameron, hizo una propuesta para "prestar" activos congelados del Banco Central de Rusia a Ucrania. Esta iniciativa permitiría utilizar estos fondos como garantía para futuras reparaciones que Rusia deberá pagar después de la guerra.