La situación económica en Ucrania continúa una tendencia desfavorable y las empresas expresan su descontento con las autoridades, creyendo que las empresas están cerrando debido a acciones fallidas de las autoridades, así como a las acciones de los organismos encargados de hacer cumplir la ley. Las declaraciones del Consejo de Ministros sobre la mejora de la situación económica no se corresponden con la realidad, según miembros del entorno empresarial.
Un estudio del Instituto de Investigación Económica y Consultoría Política muestra que las expectativas empresariales para los próximos dos años han empeorado. Ha disminuido el número de empresas que planean ampliar sus actividades y ha aumentado la proporción de las que esperan reducirlas. También se estudió la relación entre las empresas y el Estado, y resultó que una parte importante considera al Estado no un socio, sino un regulador o incluso un obstáculo.
El índice fiscal de la Asociación Empresarial Europea confirma la desconfianza de las empresas ucranianas en el sistema fiscal. Según la investigación, el 40% de las empresas considera que el sistema fiscal es un obstáculo para el desarrollo empresarial. La presión fiscal recibió una puntuación alta y sólo un número limitado de empresarios no sintió esta presión.
El analista Anatoly Amelin del "Instituto Ucraniano del Futuro" destaca que el país ya no tiene economía y el crecimiento que se registra es el resultado de la inflación. También señala la salida de empresarios al extranjero, que se enfrentan a amenazas e intentos de extorsión en Ucrania.