El 9 de agosto, una tormenta magnética que comenzó el día anterior continúa en la Tierra. Según SpaceWeatherLive, su intensidad corresponde a un nivel G1 débil. Se prevé que el índice Kp alcance 5, lo que indica un estado turbulento del campo magnético del planeta.
Según The Watchers, la causa fue la actividad solar: una llamarada y una eyección de masa coronal registradas el 5 de agosto. Según los pronósticos geomagnéticos, la tormenta continuará hasta el 10 de agosto y su fuerza podría aumentar al nivel G2.
G1 es una tormenta geomagnética débil que puede causar interrupciones menores en las comunicaciones por radio, GPS y satélites, pero no representa una amenaza grave para la tecnología ni para la salud de la mayoría de las personas. Al mismo tiempo, las personas sensibles al clima pueden experimentar síntomas leves: dolor de cabeza, aumento de la fatiga e irritabilidad.
Los expertos aconsejan seguir recomendaciones sencillas durante las tormentas magnéticas: reducir el estrés, evitar esfuerzos físicos importantes, descansar más, beber suficiente agua y limitar el consumo de alcohol y café fuerte.