El consumo regular de uvas aporta beneficios tangibles al organismo en poco tiempo y proporciona beneficios adicionales con el uso a largo plazo, según afirman nutricionistas en una entrevista con Parade. Esta conocida fruta de verano combina un alto contenido de agua, electrolitos beneficiosos y un complejo de sustancias bioactivas, lo que la hace valiosa para la dieta diaria.
Ayuda a mantener el equilibrio hídrico del cuerpo: la mayoría de las bayas son agua, y el potasio de las uvas ayuda a restablecer el equilibrio electrolítico. Gracias a la combinación de agua y fibra, las uvas también ayudan a normalizar el sistema digestivo: la fibra soluble ralentiza la digestión y favorece la microflora beneficiosa, mientras que la fibra insoluble promueve la regularidad intestinal y previene el estreñimiento.
A pesar de sus azúcares naturales, las uvas, gracias a su contenido de fibra, no provocan picos bruscos de glucosa en sangre en la mayoría de las personas, lo que ayuda a mantener niveles estables de energía y un mejor estado de ánimo durante todo el día. A largo plazo, los compuestos vegetales presentes en las uvas (flavonoides y resveratrol) reducen la inflamación, lo cual es un factor importante en la prevención de enfermedades cardíacas crónicas, algunos tipos de cáncer y problemas dermatológicos.
Los beneficios cardiovasculares se deben a las propiedades antiinflamatorias y antioxidantes de los flavonoides, que protegen los vasos sanguíneos y reducen el estrés oxidativo. Además, las uvas refuerzan el sistema inmunitario: contienen vitamina C y otros nutrientes que ayudan al organismo a combatir infecciones.
Los expertos están particularmente interesados en los efectos positivos del resveratrol, un compuesto presente en las uvas, especialmente en las variedades oscuras. Estudios han vinculado el resveratrol con una mejor función cerebral y un menor riesgo de enfermedades neurodegenerativas. Por lo tanto, incluir uvas en la dieta también podría ser beneficioso para la salud cognitiva a largo plazo.
¿Qué elegir: uvas verdes o rojas? Los beneficios de ambas variedades son prácticamente los mismos: son hidratantes y nutritivas, además de aportar fibra y vitaminas. Además, las variedades rojas y oscuras suelen contener más resveratrol, así que si tu objetivo es reforzar la protección antioxidante, es recomendable darles preferencia. Como con cualquier alimento, es importante mantener la moderación: las personas con trastornos metabólicos graves o diabetes deben consultar con un médico sobre las porciones y la frecuencia de consumo.
