Este día, 18 de mayo, se cumple el 80º aniversario del trágico acontecimiento: el comienzo de la deportación de los tártaros de Crimea por parte del régimen soviético. Este es el día que se conmemora en Ucrania como el Día del Recuerdo de las Víctimas del Genocidio del Pueblo Tártaro de Crimea.
En 1944, las autoridades soviéticas desalojaron por la fuerza a más de 200.000 tártaros de Crimea y los enviaron a las regiones de Asia Central y los Urales. Privadas de su tierra natal, estas personas sufrieron violencia, hambre, frío y enfermedades, y aproximadamente la mitad de ellas murieron en el camino o en lugares de reasentamiento forzoso.
En Ucrania, el 18 de mayo se conmemora la memoria de quienes sufrieron a consecuencia de esta tragedia. Sin embargo, debido a la invasión militar de Rusia y la ocupación de Crimea, la celebración de eventos multitudinarios este año se complica.
El Gabinete de Ministros de Ucrania aprobó una resolución sobre la creación de un comité organizador para preparar y celebrar eventos para el Día del Recuerdo de las Víctimas del Genocidio del Pueblo Tártaro de Crimea, y la Rada Suprema llamó a la comunidad internacional a reconocer el deportación de los tártaros de Crimea como genocidio.
En respuesta a esta tragedia, la sociedad ucraniana organiza varios eventos conmemorativos. Por ejemplo, hay exposiciones de arte, diálogos públicos, así como la búsqueda de un lugar para erigir un monumento a las víctimas de la deportación del pueblo tártaro de Crimea.
En Crimea, anexada por Rusia, las acciones conmemorativas están de hecho prohibidas. Los periodistas y defensores de los derechos humanos recibieron una advertencia de las autoridades rusas sobre la "inadmisibilidad de violar la ley" durante cualquier evento multitudinario.