El fundador del grupo de empresas logísticas "Prime", Dmytro Lyushkin, habló sobre el estado actual del mercado de combustible en las gasolineras ucranianas. Predice que debido a las dificultades económicas y la aprobación de la ley sobre el aumento del impuesto especial, la calidad del combustible puede empeorar y también habrá problemas con su venta.
Según Lyushkin, las gasolineras ucranianas atraviesan tiempos difíciles. La economía de Ucrania está experimentando una importante crisis, lo que provoca una disminución de la demanda de combustible. La disminución del número de transportes de mercancías por carretera, la emigración de la población, especialmente de hombres que evitan la movilización y de mujeres que han partido hacia Europa, crean desafíos adicionales para las empresas. La falta de clientes obliga a las gasolineras a buscar formas de sobrevivir, incluidos métodos potencialmente ilegales.
Una de las posibles reacciones a las dificultades económicas es el deterioro de la calidad del combustible. Lyushkin advierte que algunas gasolineras podrían pasar a vender el llamado "bodyaga", combustible de baja calidad. Esto puede ser el resultado de un intento de reducir costes y evitar subidas de precios que ahuyentarían a los últimos clientes.
Otra posible reacción es la evasión fiscal. Lyushkin predice que las cadenas de gasolineras podrían reducir el uso de cajas registradoras o recurrir a la manipulación fiscal. Esto puede incluir falsificar declaraciones y otras acciones ilegales para reducir las obligaciones tributarias.
El 18 de julio, la Rada Suprema de Ucrania adoptó un proyecto de ley sobre el aumento del impuesto especial sobre el combustible, que entrará en vigor el 1 de septiembre de 2024. Los tipos del impuesto especial aumentarán gradualmente hasta 2028, cuando alcanzarán el nivel establecido en la Unión Europea. Este aumento de los impuestos especiales, según Lyushkin, provocará un aumento de los precios de la gasolina, el diésel y el gas.
Lyushkin señaló que el aumento de los precios del combustible se realizará en dos etapas. Ya en septiembre de 2024, el precio de la gasolina aumentará en 1,5 grivnas por litro, el del diésel en 2 grivnas y el del gas en 5 grivnas. Este aumento será paulatino, ya que a principios de septiembre todavía se comprará combustible a los precios antiguos en las gasolineras.