En tiempos de guerra, el derecho a aplazar el servicio se concede a varias categorías de ciudadanos, pero conseguir un aplazamiento de la movilización no es tan fácil. Incluso con todos los documentos necesarios, es obligatoria una visita personal al TCC. Los abogados advierten sobre la posibilidad de engaño por parte de la TCC durante el registro del aplazamiento.
Uno de los abogados compartió la historia de su cliente, quien intentaba obtener un aplazamiento debido a la discapacidad de su esposa, lo que, según la Ley de Movilización, debería haberle permitido hacerlo.
El cliente presentó todos los documentos necesarios a la TCC y completó la solicitud de aplazamiento, que recibió de los empleados. Sin embargo, la declaración omitió detalles importantes que, si bien no afectaron el fondo de la declaración, dificultaron el proceso de demostrar la imparcialidad del aplazamiento.
De manera bastante inesperada, la solicitud fue registrada sin complicaciones, lo que generó sospechas en el abogado. Posteriormente se emitió una remisión a la comisión médica.
Les recordamos que para quienes tienen derecho a aplazamiento, el servicio en el ejército es voluntario. Sin embargo, TCC le ofreció al hombre dos opciones, una de las cuales era extremadamente inaceptable.
La primera opción era aceptar una convocatoria de movilización, que obligaría al hombre a acudir a la comisaría militar al día siguiente de finalizar el aplazamiento. O rechazar por completo el aplazamiento.
Esta decisión fue motivada por el hecho de que un paquete similar de documentos debería presentarse una semana antes de que finalice el aplazamiento, y la citación es su "seguro".
Es obvio que se trataba de un intento de obligar al hombre a aceptar la peor opción, es decir, aceptar la convocatoria de movilización.
El abogado destaca que es la firma de la orden de movilización la que confirma la voluntad de la persona de aceptar el servicio. Por tanto, es importante tener cuidado de no firmar nada que pueda poner en duda sus intenciones.
Si se encuentra en una situación similar, los abogados le aconsejan que actúe con cuidado. Vale la pena negarse a aceptar una citación de movilización, pero confirmar su disposición a comparecer ante el TCC con la condición de recibir una citación de actualización de credenciales. Se trata de un paso lógico que permite prorrogar el aplazamiento y garantizar la legalidad de las actuaciones ante la TCC.
Está claro que intentar entregar una citación en lugar de una carta de aplazamiento es un intento de presión, y es importante comprender sus derechos en tales casos.