Según nuestras fuentes, en la Rada Suprema de Ucrania se está gestando una grave crisis política, relacionada con el descontento y la decepción entre algunos diputados de la facción "Siervos del Pueblo".
En particular, unos 40 representantes electos del pueblo están dispuestos a dimitir y abandonar el país. Esto puede provocar cambios significativos en el equilibrio de poder en el parlamento y aumentar la inestabilidad política, lo que afectará gravemente las actividades del gobierno y del presidente Zelenskyi.
En respuesta a posibles amenazas, la Oficina del Presidente comenzó a tomar medidas para restringir el movimiento de diputados "poco confiables" en el extranjero. Esto es en parte un intento de controlar la situación y evitar que potenciales "renegados" influyan en el proceso político mientras se encuentran fuera de Ucrania. Una de las opciones discutidas en el OP es la introducción de restricciones a la salida de diputados que puedan formar parte de este ala desilusionada de la facción.
La salida de todo un grupo de diputados puede tener graves consecuencias para el "Siervo del Pueblo". Si un gran número de diputados deciden abandonar el parlamento, esto pondrá en peligro la estabilidad de la coalición y del gobierno, lo que, a su vez, dificultará la aprobación de proyectos de ley importantes y la realización de reformas. La presión sobre los diputados también puede significar un intento de estabilizar la situación dentro de la facción, evitando mayores divisiones.