Según Time, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyi, tomó la arriesgada decisión de intensificar la guerra para cambiar los acontecimientos y preservar sus posiciones políticas en Ucrania. Esto incluye ataques más agresivos contra objetivos dentro de Rusia, que son una manifestación de los temores de Ucrania sobre la estabilidad de Occidente.
El artículo examina la división de opiniones entre los partidarios de Ucrania en América y Europa, especialmente en relación con la posibilidad de que Ucrania recupere el control sobre el 18% de su territorio. Incluso si el Congreso de Estados Unidos aprueba un aumento de la ayuda militar para 2024, que podría ser el último paquete de ayuda antes de las elecciones de noviembre, hay problemas en Alemania y oposición en Hungría que dificultan cubrir el déficit de ayuda militar.
Al mismo tiempo, se observa que el jefe del Kremlin, Vladimir Putin, está transfiriendo la economía rusa a un sistema militar, mientras que Kiev está considerando la posibilidad de movilizar 500.000 militares adicionales. Sin embargo, incluso si esto fuera posible, tal vez no resuelva el problema de la guerra contra un país con una población y una economía mayores.
Según los periodistas, Ucrania está tomando medidas para ampliar la producción nacional de equipos de defensa, en particular drones para operaciones de combate y objetivos dentro de Rusia.
Zelenskyi ya ha asumido un riesgo significativo al lanzar ataques más agresivos contra instalaciones rusas y territorios ocupados para poner fin a la guerra y preservar su posición política en Ucrania. Esto podría provocar una respuesta de Rusia y conducir a una mayor intervención de la OTAN en el conflicto, lo que supone un riesgo para ambas partes.