Las Fuerzas de Defensa de Ucrania destruyeron con éxito el grupo de asalto de la 155.ª Brigada de Infantería de Marina de la Flota del Pacífico de la Federación Rusa, que anteriormente era "famoso" por sus abusos contra militares y civiles ucranianos. Así lo informó el servicio de prensa de las Fuerzas Aerotransportadas de Asalto de las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Durante la operación en uno de los asentamientos de la región de Kursk, los militares rusos, que participaron en las atrocidades contra los prisioneros, encontraron una respuesta digna de los paracaidistas ucranianos de la 95ª brigada separada de asalto polaco.
"Estos eran bastardos de la 155.ª brigada de marines a quienes les gusta mostrar sus supuestas hazañas, en particular, el abuso de los prisioneros y los disparos a los soldados ucranianos que se rindieron", dijeron las Fuerzas Armadas.
Se observa que las normas de los Convenios de Ginebra que protegen a los prisioneros están vigentes en el mundo, pero el ejército ruso las viola sistemáticamente, ignorando el derecho internacional. Esta vez, los intentos de los rusos de alardear de sus "logros" fracasaron: fueron completamente destruidos por las fuerzas ucranianas durante la batalla.
Las operaciones de las Fuerzas de Defensa en la región de Kursk continúan, lo que indica la continuación de las acciones activas para destruir las fuerzas enemigas y estabilizar la situación en el frente. Al mismo tiempo, Rusia está intentando fortalecer su posición enviando tropas y equipos adicionales a la región.