Según los medios rusos, el dron simplemente cayó cerca de la fábrica de pólvora de Tambov, sin que se registraran daños. Al mismo tiempo, según información de la Dirección General de Inteligencia, en la noche del 19 de enero, drones atacaron la propia fábrica, especializada en la producción de pólvora para armas y municiones.
Fuentes del servicio especial afirman que aún se están determinando las consecuencias del ataque a la planta de pólvora, pero en la ciudad de Klintsi se informó de "daños importantes a la instalación militar".
"Putin ha concentrado la mayor parte de los medios de guerra electrónica y de defensa antiaérea en los territorios ocupados de Ucrania, y se seguirán desarrollando instalaciones militares en el territorio de la Federación Rusa", dijo la fuente.
Posteriormente, el gobernador de la región de Bryansk, Bogomaz, anunció que las fuerzas de defensa aérea del Ministerio de Defensa ruso derribaron dos drones ucranianos en la región de Bryansk.
Oficialmente, las autoridades y los militares ucranianos se abstienen actualmente de comentar sobre estos ataques en el territorio de la Federación Rusa. En los comentarios a la publicación, los rusos expresan su sorpresa por cómo los drones lograron atravesar el territorio del país agresor.
El experto internacional y veterano del batallón "Aidar" Dykiy compartió su opinión sobre las capacidades de los drones ucranianos: "Esto no significa que tengan este aspecto. Pero me refiero a características tácticas y técnicas. Es decir, se trata de un dron de largo alcance que puede volar a más de mil kilómetros y alcanzar un objetivo allí según las coordenadas previamente introducidas. En realidad es de la misma clase de coche", dijo al aire.
El experto también destacó que se trata de un "brillante ejemplo de cooperación público-privada", ya que estas armas no provienen de los aliados de Ucrania.