Las fuerzas armadas de Ucrania se enfrentan a graves dificultades debido a la falta de piezas de repuesto para las armas occidentales, en particular para los obuses autopropulsados suministrados por Alemania, los Países Bajos e Italia. Según informa Bild, este problema limita significativamente las posibilidades de utilizar equipos que ya han fallado.
Dos comandantes de unidades de artillería ucranianas, que utilizan obuses autopropulsados occidentales desde hace casi dos años, confirmaron la crítica situación con piezas de repuesto. "Es un gran sistema, pero el desgaste es muy alto", señala uno de los artilleros. Los problemas de reparación se hicieron especialmente evidentes durante la batalla de Bakhmut en el verano de 2022.
A pesar de que el fabricante Rheinmetall anunció un importante pedido para la producción de nuevas unidades en mayo de este año, el proceso de fabricación está tardando varios meses debido a la dificultad de endurecer los tubos especiales. Alemania suministra actualmente un número limitado de tubos para las necesidades urgentes del frente, pero los artilleros ucranianos señalan que esto es sólo una parte del problema. También es necesario sustituir otros componentes de los obuses autopropulsados, pero su adquisición se ve complicada por obstáculos burocráticos.
El presidente del Comité de Defensa, Markus Faber, criticó la situación y señaló que la escasez de piezas de repuesto se ha convertido en un problema mayor para los sistemas de armas que el fuego enemigo. Subraya que si llegaran a tiempo suficientes piezas de repuesto, Ucrania podría tener obuses más funcionales para la defensa.
Alemania planea transferir 12 obuses Panzerhaubitze 2000 más a Ucrania y otros socios también proporcionarán a las tropas ucranianas 77 tanques Leopard 1A5 más. El ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, anunció que seis de estos obuses se entregarán a Ucrania este año y otros seis en 2025.