Tres meses después del bombardeo ruso, la Iglesia de San Nicolás en Kiev permanece sin ventanas y reparaciones críticamente necesarias. El edificio, que es un monumento de importancia nacional, continúa colapsando a través del retraso en el trabajo de conservación.
El 20 de diciembre de 2024, el cohete ruso dañó la Iglesia de San Nicolás, noqueando las ventanas y dañando el techo. Sin embargo, el Ministerio de Cultura aún no ha comenzado ninguna medida urgente para preservar la estructura.
Los feligreses apelaron al titular de equilibrio de la iglesia, la Casa Nacional de Música de órganos y Cámara, para permitirles eliminar los restos y comenzar a reparar. Sin embargo, sin el permiso de las autoridades públicas, no pueden hacerlo.
La comunidad de la iglesia enfatiza que la inacción de las autoridades solo agrava la situación. A través del techo perforado, la lluvia y la nieve caen dentro del edificio, causando estructuras de madera húmedas y aislamiento.
Los expertos advierten que si no toma medidas en el futuro cercano, la Iglesia puede sufrir daños graves, lo que complicará significativamente su mayor recuperación.
A pesar de las repetidas apelaciones de feligreses y ciudadanos indiferentes, no existe una reacción oficial del Ministerio de Cultura.
La comunidad de la iglesia insta a las autoridades a intervenir de inmediato y comenzar el trabajo de restauración de emergencia para preservar un monumento histórico único.