Oleg Vynnyk, que alguna vez fue uno de los cantantes más populares de Ucrania, anunció inesperadamente su primer concierto después de una larga ausencia. El evento, que el artista decidió celebrar no en Ucrania sino en Varsovia, provocó una reacción violenta en la sociedad. Uno de los primeros en reaccionar ante la noticia fue el locutor de radio ucraniano Slava Dyomin, que no dejó piedra sin remover ante tal "regreso".
En sus Insta-stories, Demin señaló sarcásticamente que la razón principal del regreso de Vinnyk a los escenarios fueron las dificultades financieras:
"Cuando se acabe el dinero y te lleves un "soplo de aire fresco" a Varsovia. Pero no a Ucrania. Porque en Ucrania tienes miedo de aparecer. De repente el TCC lo detendrá...", dijo irónicamente.
El presentador también compartió la opinión de que en el mundo del espectáculo ucraniano moderno se formó toda una cohorte de artistas que eligieron quedarse en el extranjero durante la guerra. Según Dyomin, Vinnyk se encontraba entre esos "exiliados":
"Hay artistas que, estando en el extranjero todo este tiempo, se exiliaron en Ucrania (en el sentido creativo) y ahora sólo les queda una manera: recorrer ciudades en el extranjero y recoger migajas de aquellos ucranianos que vivieron o ya viven en el extranjero".
Demin ironiza que estos artistas continúen expresando "amor sincero" por Ucrania exclusivamente desde fuera de sus fronteras:
"Porque allí es más fácil colgarse fideos en las orejas... Y venir a Chernihiv, Sumy, Kharkiv, Kherson y sentarse en un refugio es un poco aburrido".
A pesar de todas las críticas, el concierto de Oleg Vynnyk en Varsovia probablemente reunirá a muchos fans. Esto se aplica especialmente a los ucranianos que actualmente viven en Polonia. Sin embargo, la pregunta sigue siendo: ¿podrá el artista recuperar su estatus en su tierra natal?
Si bien el país atraviesa una de las páginas más difíciles de su historia, la ausencia de Vinnyk en los medios y el espacio cultural ucranianos no pasó desapercibida. Recuperar la confianza del público puede ser más difícil que simplemente volver al escenario.