El Tribunal del Distrito de Holosiivskyi de Kiev declaró ilegal la actuación de la policía durante el allanamiento a un club gay de la capital, ocurrido el 1 de agosto. El caso en cuestión se refería al ciudadano Serhiy S., detenido y acusado de "desobediencia maliciosa" y "vandalismo menor".
El allanamiento al club Dark Room se llevó a cabo el Día de Luto por las víctimas del ataque con misiles. El motivo de la visita policial fue una llamada anónima sobre el volumen alto de la música. En el expediente, la policía alegó que Serhiy S. se comportó agresivamente, profirió insultos y se resistió. Sin embargo, el propio hombre, al igual que los demás detenidos, declaró que no había alterado el orden público ni sabía nada del Día de Luto.
Además, Serhiy S. afirmó que, durante el arresto, la policía le quitó su iPhone 15 Pro sin registrarlo en los protocolos. El teléfono nunca le fue devuelto.
Pero los detalles más escandalosos se conocieron en la audiencia judicial. Los detenidos declararon que en la comisaría fueron humillados, golpeados y obligados a prestar testimonios "necesarios" durante toda la noche. La policía tomó fotos ofensivas y los trasladó al Centro Central de Investigación Criminal para aclarar los datos.
Tras examinar el expediente, el tribunal no halló pruebas de la conducta ilícita de Serhiy S. En particular, las actas no contenían información específica sobre su resistencia o vandalismo.
Como resultado, el tribunal no solo archivó el caso contra Serhiy S., sino que también ordenó a la policía que le devolviera el iPhone que le fue arrebatado. Además, el tribunal emitió una sentencia separada en la que reconoció varias acciones ilegales por parte de la policía, entre ellas:
- aplicación de métodos no autorizados a los detenidos,
- violación de las reglas para trabajar con apelaciones anónimas,
- Detención de ciudadanos por un período significativamente superior a las tres horas establecidas por la ley.