En Odesa, agentes del Servicio de Seguridad de Ucrania detuvieron a un ciudadano moldavo que organizaba un plan para suministrar ilegalmente equipo militar a Transnistria. Las fuerzas del orden incautaron casi 500 placas de blindaje y más de doscientos portaplacas que se pretendía contrabandear a través de la frontera bajo la apariencia de artículos domésticos.
Según la investigación, el extranjero actuó en nombre de un alto representante del supuesto "Ministerio de Defensa" del PMR no reconocido. Desde principios de año, ha estado buscando cómplices y estableciendo canales para la compra de equipos de protección. La clave fue el acuerdo con la empresa de Kiev "Smart Space Interiors", mediante el cual se adquirieron 472 placas blindadas marcadas "Miilux Protection 500" de clase de protección 4 y 259 portaplacas camuflados.
Para ocultar el verdadero propósito de la mercancía, el organizador alquiló un almacén cerca de Kiev, donde se entregó el equipo. El plan posterior consistía en transportar el equipo a Transnistria en pequeñas piezas, camuflado entre enseres domésticos. El transporte se realizaría en una Toyota Sequoia a través de la frontera estatal de Ucrania.
Involucró en el plan a otro ciudadano moldavo que conocía bien los procedimientos aduaneros y que se suponía debía garantizar un cruce fronterizo sin problemas.
Sin embargo, el plan no se implementó. El 13 de marzo de 2025, agentes del SBU realizaron una operación especial en la región de Odessa y detuvieron al organizador. Durante el registro de un almacén alquilado, se incautó todo el lote de equipo militar.
Al día siguiente, el hombre fue acusado de varios artículos del Código Penal de Ucrania: tráfico ilegal de armas y municiones, preparación para un delito, participación en una conspiración criminal y violación de las reglas de transferencias internacionales de bienes militares.
El Tribunal del Distrito Peresypsky de Odessa decidió detener al sospechoso durante 60 días y fijar una fianza de más de 1,5 millones de grivnas.
Las fuerzas del orden investigan actualmente la participación del detenido y sus posibles cómplices en otros canales de suministro de equipo a Transnistria. De ser declarado culpable, podría enfrentar hasta siete años de prisión.