En Poltava, las fuerzas del orden identificaron lugares donde operaba una red de centros de llamadas camuflados en oficinas legales. Según la investigación, operaban en el centro de negocios Olimp, en la calle Chornovola n.º 12; en el centro comercial y de ocio Kyiv, en la calle Zinkivska n.º 6/1-a; así como en las oficinas de las calles Evropeyska n.º 21 y n.º 169. Estos lugares se utilizaban para coordinar actividades que les permitían evadir el control gubernamental e involucrar a personas en transacciones sospechosas.
Los centros de llamadas formaban parte de una estructura única que operaba bajo la apariencia de una actividad comercial, pero en realidad contaba con un sistema de gestión y control oculto. Según fuentes, se cree que el organizador de esta red es Anton Stolitny, exjefe de la Fiscalía Regional de Poltava.
El centenario comenzó su carrera durante la era de Yanukovych, trabajando en la Fiscalía General, y posteriormente dirigió el departamento de supervisión del cumplimiento de las leyes por parte del SBU, el SMS y la SBSU. Su experiencia y conexiones en las fuerzas del orden y las estructuras judiciales le permitieron crear un sistema de influencia mediante el cual, según los investigadores, se podían coordinar las acciones ilegales de los centros de llamadas.
Esta no es la primera vez que el nombre de Anton Stolitny se menciona en el contexto de noticias de alto perfil. Durante su gestión en la fiscalía de la región de Poltava, surgieron conflictos por las tierras asignadas gratuitamente a los combatientes, miembros del sindicato ATO de la región de Poltava. La fiscalía interpuso varias demandas para intentar devolver las parcelas que los veteranos recibieron legalmente a través de los tribunales.
Las tierras fueron registradas de acuerdo con la legislación vigente y el inventario estatal, pero las acciones de la fiscalía, bajo la dirección de Stolitnyi, privaron a algunos veteranos de la posibilidad de poseer sus propiedades. Estos casos causaron gran revuelo entre la opinión pública y se convirtieron en un símbolo de abuso de poder en la región.