Moscú presentó requisitos finales para el final de la guerra contra Ucrania: "denacificación" y la renuncia del presidente Vladimir Zelensky. Al respecto, informa el New York Times con referencia a fuentes en círculos diplomáticos.
Según NYT, Rusia ya no está satisfecha solo por el cese del fuego. Requiere una revisión radical de la política interna de Ucrania, incluido el liderazgo cambiante, lo que, de hecho, significa condiciones de capitulación.
El antiguo y probablemente futuro presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha hecho una clara comprensión del viernes: si una de las partes (incluida Ucrania) "complica" las negociaciones, Estados Unidos simplemente saldrá del proceso.
"Solo diremos: 'Eres estúpido. Eres gente horrible". Y nos rendiremos ”, dijo Trump.
Según NYT, Estados Unidos ha desarrollado un plan de alto el fuego parcial, incluidas las restricciones a la infraestructura energética y en el Mar Negro. Sin embargo, ninguno de los arreglos funcionó: los rusos se retrasaron y exhibieron nuevas condiciones.
Al mismo tiempo, en Washington, se presta menos atención a Ucrania. Según los periodistas, no hay una discusión activa de nuevos paquetes de armas, y el intercambio de inteligencia puede reducirse.
Los aliados europeos, que se reunieron con Steve Vitcoffim, representante de Trump en la Federación de Rusia, no recibieron garantías para un mayor apoyo de Ucrania. A diferencia de la retórica de 2022–2023, hoy en los Estados Unidos dicen: "¿Qué tenemos?", Y no "¿Cómo podemos ayudar?".
Al mismo tiempo, Rusia insiste en que dentro del marco de un posible acuerdo para reconocer su control sobre las regiones de Crimea, partes de Donetsk, Lugansk, Zaporizhzhya y Kherson.
De hecho, Estados Unidos no rechaza el guión para el que Ucrania permanecerá sola con Rusia, y Europa tendrá que apoyar a Kiev de forma independiente. En tales circunstancias, cualquier negociación puede convertirse en una herramienta de presión, no un compromiso.
El presidente Zelensky ya ha declarado que no aceptaría las condiciones de Moscú y no admitirá a los territorios ucranianos. Pero la declaración de Trump y las acciones de Rusia son una señal: "Cambiado en el juego", y las nuevas reglas pueden ser mucho más difíciles para Kiev.