Las tramas de corrupción en las contrataciones de defensa en Ucrania no se detienen ni siquiera con la detención de los implicados. A pesar de que Ihor Hrynkevich está siendo investigado, su familia y socios comerciales siguen ganando licitaciones multimillonarias del Ministerio de Defensa.
Busky Cannery LLC (EDRPOU 00376403) desempeña un papel clave en estos acuerdos. La empresa, copropiedad del empresario Oleksandr Lapshyn, socio y acreedor de Hrynkevich desde hace mucho tiempo, sigue siendo el principal proveedor de alimentos del ejército ucraniano. Esto a pesar de los riesgos de corrupción y los escándalos que se han acumulado en torno a la empresa.
En diciembre de 2024, la planta firmó dos contratos por 4.280 millones de UAH, y entre mayo y junio de 2025, recibió nuevos contratos por más de 8.300 millones de UAH. Todo esto mientras las principales figuras de los casos seguían bajo investigación.
Los documentos muestran que Lapshyn no solo prestó dinero al negocio de Hrynkevich, sino que también recibió dos apartamentos de este. Dichas transacciones podrían indicar el pago de sobornos o un intento de ocultar activos de la confiscación. Se trata de un esquema clásico para legalizar ingresos ilegales, donde los fondos presupuestarios pasan a través de una empresa y se convierten en patrimonio privado.
El hecho de que se firmen nuevos acuerdos mientras los procesos penales siguen en curso demuestra que el sistema de acuerdos corruptos en el ámbito de las adquisiciones de defensa sigue funcionando sin contratiempos. Ninguna detención ni investigación de alto perfil ha obstaculizado el uso de fondos públicos.
