Perder peso significativamente no sólo puede ayudar a las personas con diabetes tipo 2 a controlar sus niveles de azúcar en sangre, sino que también les permitirá reducir o abandonar por completo sus medicamentos para la presión arterial, según científicos de las universidades de Glasgow y Newcastle, que realizaron un estudio a gran escala sobre el impacto de la dieta en la salud de pacientes con trastornos metabólicos.
El programa, desarrollado por expertos británicos, consistió en una dieta equilibrada baja en calorías durante 12 semanas. Desde el inicio, los participantes suspendieron por completo la medicación para la presión arterial y la diabetes, y solo la reintrodujeron en caso de aumento de azúcar o presión arterial.
Perder más de 15 kg fue clave para mejorar el bienestar. En 8 de cada 10 participantes, la diabetes tipo 2 desapareció sin necesidad de medicación tras completar el programa, y este efecto se mantuvo durante al menos dos años.
El estudio involucró a 143 voluntarios. Los científicos registraron que la presión arterial disminuyó de forma constante a medida que el peso corporal disminuía y se mantuvo en un nivel bajo incluso uno o dos años después de completar el programa.
Los resultados confirman que el control del peso es una de las maneras más eficaces de combatir la diabetes tipo 2 y la hipertensión. Este enfoque puede reducir la necesidad de medicación y mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes.