Los ácidos grasos omega-3, que se consideran buenos para el cerebro, el corazón y la piel, también pueden tener un efecto peligroso.
El cuerpo humano no puede producir omega-3 por sí solo, por lo que es importante obtenerlos de alimentos como el pescado, las semillas y los frutos secos. Ayudan a reducir la inflamación, protegen contra el deterioro cognitivo y favorecen la salud vascular.
Sin embargo, un nuevo estudio de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC), publicado en el European Heart Journal: Cardiovascular Pharmacotherapy, ha descubierto que tomar suplementos ricos en omega 3 puede causar fibrilación auricular (FA), una enfermedad peligrosa en la que el corazón comienza a latir de forma irregular.
Según los médicos, la fibrilación auricular (FA) quintuplica el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular. La Asociación Americana del Corazón (AHA) también señala que esta afección puede provocar coágulos sanguíneos, insuficiencia cardíaca y otras complicaciones.
Los investigadores aclararon que el mayor riesgo se observa en pacientes que ya padecen problemas cardíacos. Sin embargo, enfatizaron que esto no significa que se deban abandonar por completo los omega-3. Se trata precisamente de los suplementos dietéticos, aunque los alimentos ricos en estos ácidos siguen siendo beneficiosos.
Los expertos aconsejan tomar suplementos de omega-3 sólo después de consultar a un médico y bajo supervisión médica.