El cáncer de mama sigue siendo uno de los cánceres más comunes entre las mujeres del mundo y de Ucrania. Al mismo tiempo, los médicos enfatizan que la detección temprana de la enfermedad aumenta significativamente las posibilidades de una recuperación completa y un tratamiento exitoso. Por eso es importante reconocer los primeros signos del cáncer de mama y buscar ayuda médica de manera oportuna.
El síntoma inicial más común del cáncer de mama es un bulto o una masa firme en la mama. Generalmente es una masa firme e indolora que no desaparece después de la menstruación, puede tener bordes irregulares y ser inmóvil. Además, los cambios en la forma o el tamaño de la mama deben ser motivo de preocupación. Una mama puede verse repentinamente más grande, cambiar de forma o volverse asimétrica sin motivo aparente.
Los médicos también prestan atención al estado de la piel. El enrojecimiento, la descamación, el engrosamiento, las hendiduras o el característico efecto de "piel de naranja" pueden ser señales de trastornos graves. Otro síntoma alarmante es la retracción repentina del pezón o la aparición de secreción, ya sea transparente, amarillenta o con sangre, especialmente si no se han observado estos cambios antes.
Aunque el cáncer de mama en etapa temprana suele ser indoloro, la incomodidad o el dolor persistentes en la mama o la axila también requieren atención médica. En algunos casos, los primeros signos pueden ser ganglios linfáticos inflamados o sensibles en la axila o la zona supraclavicular, incluso sin cambios perceptibles en la mama.
Los expertos señalan que el grupo de riesgo incluye a mujeres con predisposición hereditaria, trastornos hormonales, menstruación precoz o menopausia tardía, quienes no han estado embarazadas, tienen sobrepeso, fuman o abusan del alcohol. Al mismo tiempo, el cáncer de mama puede desarrollarse sin factores de riesgo evidentes.
Para una detección temprana, los médicos recomiendan la autoexploración mamaria mensual, revisiones preventivas regulares con un ginecólogo o mamólogo y, a partir de los 40 años, una mamografía sistemática. Cualquier cambio sospechoso no debe ignorarse ni posponerse.
Los médicos enfatizan que los primeros signos del cáncer de mama pueden ser sutiles y no causar dolor. Es la atención a la propia salud y los exámenes preventivos regulares lo que permite detectar la enfermedad en una etapa temprana y salvar vidas.

