El Fondo Monetario Internacional (FMI) empeoró el crecimiento de la economía de Ucrania para 2025, lo que lo reduce en un 0,5% a 2-3% del PIB. Sucedió en el contexto del conflicto militar prolongado, el daño a la infraestructura energética y las restricciones en el mercado laboral, que afectan negativamente el desarrollo económico del país.
Según el prescrilismo del fondo, en 2024, se espera que el PIB real aumente al 3.5%. Sin embargo, en 2025, el crecimiento económico se reducirá al 2-3%, que es el resultado de factores adversos, en particular, de la continuación de la guerra con Rusia.
La reducción del pronóstico del crecimiento económico no solo se limita al FMI. El Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (EBRD) también ha ajustado recientemente su pronóstico para 2025, lo que lo reduce al 3.5% del 4.7% anterior. Esto indica un debilitamiento general de la actividad económica en Ucrania.
Además, el Banco Mundial también redujo el pronóstico de crecimiento del PIB para 2025, al 2% del 6.5% anterior. Sin embargo, el banco elevó el pronóstico para 2026 al 7%, lo que indica la posibilidad de recuperación de la economía a largo plazo.
También se cambiaron los pronósticos del Banco Nacional de Ucrania: dados los riesgos de seguridad y la difícil situación en el mercado laboral, la NBU redujo el pronóstico del crecimiento real del PIB para 2025 de 4.1% a 3.6%. Al mismo tiempo, el presupuesto estatal-2025 se basó en el crecimiento del PIB al 2.7%.
La situación en el mercado laboral ucraniano y el sector energético, así como los factores económicos externos, continúan siendo desafíos importantes para restaurar la economía del país en la guerra.