El Banco Nacional de Ucrania (NBU) ha publicado sus pronósticos para los aranceles para la vivienda y los servicios comunales, combinando que en 2025 permanecen sin cambios. Sin embargo, desde 2026, se espera un aumento gradual de los aranceles, que, según los economistas, se asociará con llevarlos a la economía.
La NBU proporciona un aumento gradual en las tareas y tarifas de impuestos especiales para la vivienda y los servicios comunales, pero los términos y parámetros de su ajuste siguen siendo inciertos, lo que crea riesgos para el pronóstico de inflación.
El pronóstico se basa en la suposición de que ciertas tarifas para los servicios públicos (gas, calefacción y agua caliente) permanecerán sin cambios durante 2025.
Sin embargo, la condición difícil en la energía y el presupuesto estatal puede causar ajustes arancelarios en los próximos años. Se supone que a partir de 2026 puede ser una tarifa gradual que traiga aranceles a niveles económicamente sólidos
El regulador señala que un aumento significativo en el costo de la energía en la eliminación rápida de los desequilibrios en el sector energético aumentará la presión inflacionaria y conducirá a un aumento de los subsidios para la población.
El retraso prolongado en la elevación de los aranceles para la vivienda y los servicios comunales a niveles económicamente justificados puede restringir la inflación, pero al mismo tiempo contribuirá a la acumulación de desequilibrios cuasi-fiscales y el deterioro de la condición financiera de las compañías de energía estatales.
Esto creará amenazas adicionales para la inversión en el sector, aumentará los riesgos de inestabilidad en el mercado energético y la presión de los precios solo cambiará para el futuro.