El ejército de ocupación ruso continúa atacando a la población civil, lanzando ataques con misiles contra las ciudades de Ucrania. Járkov se convirtió en el nuevo objeto de esta cruel población. La casa que fue alcanzada por un cohete ruso la mañana del 23 de enero se convirtió en una más del conjunto.
El alcalde de Járkov, Ihor Terekhov, compartió en el teletón detalles impactantes de lo ocurrido. El ejército de ocupación ruso atacó la ciudad con tres cohetes durante el último día. Tras el ataque de la tarde del 23 de enero, nueve personas resultaron heridas, entre ellas cuatro niños.
"Hasta ahora, todas las casas en Járkov han sido conectadas a la calefacción después del ataque , excepto la casa que fue alcanzada por el misil. Dos casas quedaron sin suministro de agua. Seis casas más siguen sin electricidad. Pero los trabajadores de la energía están trabajando para restablecer la red", concluyó el alcalde.
Uno de los ataques provocó la destrucción de un edificio de oficinas y una institución científica, así como daños en el pueblo, cafés y tiendas. El edificio administrativo quedó destruido. Como consecuencia del ataque murieron ocho personas, entre ellas un niño de 4 años que fue rescatado de entre los escombros.
"Después del ataque a Járkov, 40 personas se encuentran en los hospitales de la ciudad. Varias personas resultan gravemente heridas y los médicos luchan por sus vidas. Hasta el momento se sabe que han muerto ocho personas, incluido un niño que fue rescatado de entre los escombros. Después de la continuación del trabajo, es posible que haya más víctimas", añadió el alcalde Terekhov.
Los socorristas, numerosos voluntarios y personal médico trabajan incansablemente, reanudando la retirada de escombros y prestando asistencia a los heridos. Sin embargo, el peligro y la amenaza de nuevas víctimas están lejos de terminar.