El canciller alemán, Olaf Scholz, confirmó el viernes en una conferencia de prensa la decisión final del gobierno alemán de no suministrar misiles Taurus de largo alcance a Ucrania. Según Scholz, esta decisión es clara e inamovible.
Alemania se ha negado repetidamente a enviar sus misiles Taurus de largo alcance a Ucrania, a pesar de las numerosas solicitudes de la parte ucraniana. Esta decisión subraya la posición clara de Berlín sobre la cuestión del suministro de armas de largo alcance. El ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, añadió que aunque Alemania se niega a proporcionar sus misiles, la cuestión del uso de armas occidentales para atacar a Rusia sigue siendo competencia de otros países.
Estados Unidos y Gran Bretaña, que ya han transferido armas de largo alcance a Ucrania, están discutiendo activamente la posibilidad de permitir que Ucrania amplíe sus ataques en territorio ruso. Según The Guardian, estos países planean incluir el despliegue de misiles en un plan más amplio para poner fin a la guerra, aunque todavía no ha habido anuncios oficiales al respecto.
El Times informa que a Ucrania se le permitirá atacar a Rusia con misiles de crucero británicos Storm Shadow, pero no con misiles balísticos estadounidenses ATACMS. Esta decisión puede cambiar la dinámica del conflicto, brindando a Ucrania oportunidades adicionales para llevar a cabo hostilidades.