El ayuntamiento de Troisdorf, ciudad alemana, adoptó una postura decisiva, bloqueando los planes de la gran empresa armamentista Diehl Defence de ampliar la producción local, parte de la cual estaba destinada al suministro a Ucrania. Según RBC-Ucrania, esta situación surgió debido a desacuerdos entre las autoridades de la ciudad y el gigante armamentista.
El alcalde de Troisdorf, poco conocido por su implicación en la política internacional, se convirtió en figura de una polémica pública tras las declaraciones del ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, que señaló la gran presión que sufre el país por los problemas con las municiones en Europa.
Diehl Defence, cuya planta en Troisdorf produce componentes clave para misiles, incluido el sistema de defensa aérea IRIS-T, que se suministra a Ucrania, se encuentra bajo un bloqueo por parte de las autoridades de la ciudad. La posición de la empresa amenaza su futuro en la región.
Los intentos decididos de Diehl Defence de adquirir un terreno en Troisdorf para ampliar la producción se convirtieron en intentos de las autoridades locales de tomar el control de este espacio urbanizado para otras necesidades. La diferencia de opinión surgió debido a la exigencia de grandes zonas de protección necesarias para la producción segura de municiones y artefactos explosivos.
Muchos miembros del ayuntamiento, en particular de los Verdes y del partido de izquierda Die Linke, se negaron a apoyar la enajenación de una gran superficie en el centro de la ciudad para las necesidades de la empresa, considerándola peligrosa e irresponsable. Esto provocó indignación entre los defensores de Ucrania, que consideran irresponsable la posición del alcalde, especialmente en el contexto de la guerra en Ucrania.
Recientemente, Alemania prometió una importante ayuda militar a Ucrania y duplicó la financiación para 2024. Sin embargo, el bloqueo de la producción de armas en Troisdorf crea nuevos desafíos e interrogantes sobre la llegada de la ayuda prometida.